Síntomas
				El síntoma más frecuente —y muchas veces el primero en aparecer— es la
				
				somnolencia diurna excesiva (SDE).
				
					Esto significa sentir un cansancio extremo durante el día, con una necesidad casi imposible de controlar de
																	                                                quedarse dormido, incluso en momentos inadecuados o mientras realizas actividades cotidianas.
La
																	                                                SDE está presente en
				
				todas las personas con narcolepsia,
				
					aunque a menudo pasa desapercibida o se confunde con otras causas. Es común sentir que, por más que se haya
																	                                                dormido por la noche, el cuerpo y la mente siguen sin descansar.
En muchos casos, los síntomas
																	                                                comienzan ya en la
				
				infancia o la adolescencia,
				
					y pueden presentarse de forma diferente a como lo hacen en adultos. Reconocer esas señales a tiempo es clave
																	                                                para un diagnóstico más rápido y una mejor calidad de vida.
			
